domingo, 27 de mayo de 2007

Poema de Marcelo Gelman


Pintura de Ruppel


Despedida


Me despido de este país.
Me despido de mis amigos,
de mis enemigos.
Amigos.
Sólo quiero recordarles
que no dejen de ser
mis amigos.
Sólo quiero recordarles
que no me olviden
a la marcha del tiempo,
a la marcha del tren
en que me vaya
que borran las huellas de la
amistad lejana.

Por Marcelo Gelman


Hijo de Juan Gelman, desaparecido por la dictadura militar argentina el 24 de agosto de 1976 junto a su esposa María Claudia García Iruretagoyena embarazada de siete meses en ese momento.
Marcelo fue asesinado en el campo de concentración “Automotores Orletti” en octubre de 1976 sus restos fueron exhumados por Equipo Argentino de Antropología Forense en 1989.
María Claudia fue trasladada a Montevideo clandestinamente a mediados de octubre de 1976 en un vuelo piloteado por el actual comandante en jefe de la Fuerza Aérea, brigadier José Pedro Malaquín. Fue recluida junto a otros uruguayos en la sede del Servicio de Información y Defensa del Ejército. Al momento del parto, fue llevada al Hospital Militar de las Fuerzas Armadas, donde dio a luz una niña. La pudo amamantar por unos días y luego se la sacaron. A María Claudia la llevaron en un centro clandestino del Ejército conocido como Valparaíso. De allí el capitán Ricardo Medina Blanco la retiró para matarla. La niña quedó en manos del coronel Jorge Silveira y del capitán de la policía Ricardo Medina. La entregaron en enero de 1977 al comisario(ya fallecido) que la anotó como hija propia y la crió.

Luego de una intensa búsqueda en Argentina y Uruguay, y presiones políticas al gobierno uruguayo, el gobierno uruguayo dio detalles de la identidad de la niña. Se hicieron los análisis de ADN y se confirmó su identidad a mediados del año 2000. La muchacha, María Macarena, se pudo entonces reencontrar con su familia nativa.

Aún no se encontraron los restos de María claudia.

Tomado de: http://www.desaparecidos.org/arg/voces/lit/poesia

viernes, 25 de mayo de 2007

Poema de Osvaldo Domingo Balbi


Pintura: Sylvia Haigermoser


Aquellas costumbres

Desenrollar los barriletes de los cables
Caminar las veredas desparejas
Atornillar el maullido de los gatos al silencio de la noche
Amanecer tantas veces como amaneceres entren en una sola historia
Desnudar el odio y el amor
Odiar el oscuro color de las iglesias
Y sacarle la lengua a Dios
Por ser el primer gil

Que se tragó lo del paraíso.


Osvaldo Domingo Balbi

Nacido en 1944.
En agosto de 1978 mientras remontaba barriletes con sus hijos es secuestrado junto con su esposa.
Fue visto por última vez con vida en septiembre de 1978 en el centro clandestino de detención “El Vesubio”


Extraído de “Palabra viva” Editado por SEA y CONABIP (Año 2005)

miércoles, 23 de mayo de 2007

Poema de Francisco Urondo


Pintura Marc Chagall


Por soledades


Un hombre es perseguido, una
familia entera, una organización, un pueblo. La
responsable de esta situación no es la codicia, sino un
comerciante con sus precios, con la imposición
de las reglas del juego. Los empresarios, la policía
con la imposición de las reglas del juego. Por eso
ese hombre, ese pueblo, esa familia, esa organización, se siente perseguida. Es más comienzan
a perseguirse entre ellos, a delatarse,
a difamarse, y juntos, a su vez, se lanzan a perseguir
quimeras, a olvidarse de las legítimas,
de las costosas pero realizables aspiraciones;
marginan la penosa esperanza. Entonces
toda la familia, todo el pueblo, entra
en el nivel más alto de la persecución: la paranoia, esa refinada búsqueda de los
perseguidos históricos y culturales.

Y ésta
es la triste historia de los pueblos
derrotados, de las familias envilecidas,
de las organizaciones inútiles, de los hombres solitarios, la
llama que se consume sin el viento, los aires
que soplan sin amor, los amores que se marchitan
sobre la memoria del amor o sus fatuas presunciones.


Francisco Paco Urondo
(del libro “Cuentos de batalla” l973-l976)


Nació en 1930, autor de “Historia Antigua”;
“Lugares”; “Nombres; “Los pasos previos”; “La patria fusilada”, etc. Muerto durante la dictadura militar en el mes de junio de 1976.

Enviado por David Sorbille

lunes, 21 de mayo de 2007

Poema de José Beláustegui


Pintura Joan Miro

Poema para no morir

Sé que algún día dejaré de pertenecer al mundo,
y nunca más podré escribir,
ni hacer el amor,
ni disfrazar la naturaleza con un poema,
ni viajar en los libros,
ni exponer mis ideas.
Por eso en este poema dejo mar, cielo y luna
mariposas, besos y sirenas,
y me dejo a mí,
porque cuando muera seguiré viviendo en estos versos.

José Beláustegui

Poema escrito a los 13 años.

Desaparecido durante la dictadura militar argentina el día que cumplía 23 años.

Extraído de “Palabra Viva” editado por SEA y CONABIP (Año 2005)

domingo, 20 de mayo de 2007

Poema de Miguel Ángel Bustos


Pintura: Diane Romanello

SUEÑO QUEBRADO

Sueño quebrado
levántate y anda.
Marcha de mi frente
abre mi tierra.
Levanta
ruda muralla de niños
al dólar de fuego y zarpa de balas.
Vuelve

joven enamorado del agua
al mordido corazón rebelde,
abraza y besa prieto hasta la llama
pedernal de lágrimas,
mi corazón
clavado a pico de sangre
en las vigilias desnudas de mi cuerpo.


MIGUEL ANGEL BUSTOS
(del libro “Corazón de piel afuera” de 1959)


Nació en l932, autor de “Cuatro murales”; “Corazón de piel afuera”;
“Fragmentos fantásticos”; “Visión de los hijos del mal”;
“El Himalaya o la moral de los pájaros”, etc.
Secuestrado y desaparecido el 31 de Mayo de l976.


Enviado Por David Sorbille




jueves, 17 de mayo de 2007

Carta de Rodolfo Walsh


CARTA ABIERTA DE RODOLFO WALSH
A LA JUNTA MILITAR


1. La censura de prensa, la persecución a intelectuales, el allanamiento de mi casa en el Tigre, el asesinato de amigos queridos y la pérdida de una hija que murió combatiéndolos, son algunos de los hechos que me obligan a esta forma de expresión clandestina después de haber opinado libremente como escritor y periodista durante casi treinta años.
El primer aniversario de esta Junta Militar ha motivado un balance de la acción de gobierno en documentos y discursos oficiales, donde lo que ustedes llaman aciertos son errores, los que reconocen como errores son crímenes y lo que omiten son calamidades.
El 24 de marzo de 1976 derrocaron ustedes a un gobierno del que formaban parte, a cuyo desprestigio contribuyeron como ejecutores de su política represiva, y cuyo término estaba señalado por elecciones convocadas para nueve meses más tarde. En esa perspectiva lo que ustedes liquidaron no fue el mandato transitorio de Isabel Martínez sino la posibilidad de un proceso democrático donde el pueblo remediara males que ustedes continuaron y agravaron.
Ilegítimo en su origen, el gobierno que ustedes ejercen pudo legitimarse en los hechos recuperando el programa en que coincidieron en las elecciones de 1973 el ochenta por ciento de los argentinos y que sigue en pie como expresión objetiva de la voluntad del pueblo, único significado posible de ese "ser nacional" que ustedes invocan tan a menudo.
Invirtiendo ese camino han restaurado ustedes la corriente de ideas e intereses de minorías derrotadas que traban el desarrollo de las fuerzas productivtas, explotan al pueblo y disgregan la Nación. Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina.

2. Quince mil desaparecidos, diez mil presos, cuatro mil muertos, decenas de miles de desterrados son la cifra desnuda de ese terror.
Colmadas las cárceles ordinarias, crearon ustedes en las principales guarniciones del país virtuales campos de concentración donde no entra ningún juez, abogado, periodista, observador internacional. El secreto militar de los procedimientos, invocado como necesidad de la investigación, convierte a la mayoría de las detenciones en secuestros que permiten la tortura sin límite y el fusilamiento sin juicio.1
Más de siete mil recursos de hábeas corpus han sido contestados negativamente este último año. En otros miles de casos de desaparición el recurso ni siquiera se ha presentado porque se conoce de antemano su inutilidad o porque no se encuentra abogado que ose presentarlo después que los cincuenta o sesenta que lo hacían fueron a su turno secuestrados.
De este modo han despojado ustedes a la tortura de su límite en el tiempo. Como el detenido no existe, no hay posibilidad de presentarlo al juez en diez días según manda un ley que fue respetada aún en las cumbres represivas de anteriores dictaduras.
La falta de límite en el tiempo ha sido complementada con la falta de límite en los métodos, retrocediendo a épocas en que se operó directamente sobre las articulaciones y las vísceras de las víctimas, ahora con auxiliares quirúrgicos y farmacológicos de que no dispusieron los antiguos verdugos. El potro, el torno, el despellejamiento en vida, la sierra de los inquisidores medievales reaparecen en los testimonios junto con la picana y el "submarino", el soplete de las actualizaciones contemporáneas.2
Mediante sucesivas concesiones al supuesto de que el fin de exterminar a la guerilla justifica todos los medios que usan, han llegado ustedes a la tortura absoluta, intemporal, metafísica en la medida que el fin original de obtener información se extravía en las mentes perturbadas que la administran para ceder al impulso de machacar la sustancia humana hasta quebrarla y hacerle perder la dignidad que perdió el verdugo, que ustedes mismos han perdido.

3. La negativa de esa Junta a publicar los nombres de los prisioneros es asimismo la cobertura de una sistemática ejecución de rehenes en lugares descampados y horas de la madrugada con el pretexto de fraguados combates e imaginarias tentativas de fuga.
Extremistas que panfletean el campo, pintan acequias o se amontonan de a diez en vehículos que se incendian son los estereotipos de un libreto que no está hecho para ser creído sino para burlar la reacción internacional ante ejecuciones en regla mientras en lo interno se subraya el carácter de represalias desatadas en los mismos lugares y en fecha inmediata a las acciones guerrilleras.
Setenta fusilados tras la bomba en Seguridad Federal, 55 en respuesta a la voladura del Departamento de Policía de La Plata, 30 por el atentado en el Ministerio de Defensa, 40 en la Masacre del Año Nuevo que siguió a la muerte del coronel Castellanos, 19 tras la explosión que destruyó la comisaría de Ciudadela forman parte de 1.200 ejecuciones en 300 supuestos combates donde el oponente no tuvo heridos y las fuerzas a su mando no tuvieron muertos.
Depositarios de una culpa colectiva abolida en las normas civilizadas de justicia,incapaces de influir en la política que dicta los hechos por los cuales son represaliados, muchos de esos rehenes son delegados sindicales, intelectuales, familiares de guerrilleros, opositores no armados, simples sospechosos a los que se mata para equilibrar la balanza de las bajas según la doctrina extranjera de "cuenta-cadáveres" que usaron los SS en los países ocupados y los invasores en Vietnam.
El remate de guerrilleros heridos o capturados en combates reales es asimismo una evidencia que surge de los comunicados militares que en un año atribuyeron a la guerrilla 600 muertos y sólo 10 ó 15 heridos, proporción desconocida en los más encarnizados conflictos. Esta impresión es confirmada por un muestreo periodístico de circulación clandestina que revela que entre el 18 de diciembre de 1976 y el 3 de febrero de 1977, en 40 acciones reales, las fuerzas legales tuvieron 23 muertos y 40 heridos, y la guerrilla 63 muertos.3
Más de cien procesados han sido igualmente abatidos en tentativas de fuga cuyo relato oficial tampoco está destinado a que alguien lo crea sino a prevenir a la guerrilla y Ios partidos de que aún los presos reconocidos son la reserva estratégica de las represalias de que disponen los Comandantes de Cuerpo según la marcha de los combates, la conveniencia didáctica o el humor del momento.
Así ha ganado sus laureles el general Benjamín Menéndez, jefe del Tercer Cuerpo de Ejército, antes del 24 de marzo con el asesinato de Marcos Osatinsky, detenido en Córdoba, después con la muerte de Hugo Vaca Narvaja y otros cincuenta prisioneros en variadas aplicaciones de la ley de fuga ejecutadas sin piedad y narradas sin pudor.4
El asesinato de Dardo Cabo, detenido en abril de 1975, fusilado el 6 de enero de 1977 con otros siete prisioneros en jurisdicción del Primer Cuerpo de Ejército que manda el general Suárez Masson, revela que estos episodios no son desbordes de algunos centuriones alucinados sino la política misma que ustedes planifican en sus estados mayores, discuten en sus reuniones de gabinete, imponen como comandantes en jefe de las 3 Armas y aprueban como miembros de la Junta de Gobierno.

4. Entre mil quinientas y tres mil personas han sido masacradas en secreto después que ustedes prohibieron informar sobre hallazgos de cadáveres que en algunos casos han trascendido, sin embargo, por afectar a otros países, por su magnitud genocida o por el espanto provocado entre sus propias fuerzas.5
Veinticinco cuerpos mutilados afloraron entre marzo y octubre de 1976 en las costas uruguayas, pequeña parte quizás del cargamento de torturados hasta la muerte en la Escuela de Mecánica de la Armada, fondeados en el Río de la Plata por buques de esa fuerza, incluyendo el chico de 15 años, Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, "con lastimaduras en la región anal y fracturas visibles" según su autopsia.
Un verdadero cementerio lacustre descubrió en agosto de 1976 un vecino que buceaba en el Lago San Roque de Córdoba, acudió a la comisaría donde no le recibieron la denuncia y escribió a los diarios que no la publicaron.6
Treinta y cuatro cadáveres en Buenos Aires entre el 3 y el 9 de abril de 1976, ocho en San Telmo el 4 de julio, diez en el Río Luján el 9 de octubre, sirven de marco a las masacres del 20 de agosto que apilaron 30 muertos a 15 kilómetros de Campo de Mayo y 17 en Lomas de Zamora.
En esos enunciados se agota la ficción de bandas de derecha, presuntas herederas de las 3 A de López Rega, capaces dc atravesar la mayor guarnición del país en camiones militares, de alfombrar de muertos el Río de la Plata o de arrojar prisioneros al mar desde los transportes de la Primera Brigada Aérea 7, sin que se enteren el general Videla, el almirante Massera o el brigadier Agosti. Las 3 A son hoy las 3 Armas, y la Junta que ustedes presiden no es el fiel de la balanza entre "violencias de distintos signos" ni el árbitro justo entre "dos terrorismos", sino la fuente misma del terror que ha perdido el rumbo y sólo puede balbucear el discurso de la muerte.8
La misma continuidad histórica liga el asesinato del general Carlos Prats, durante el anterior gobierno, con el secuestro y muerte del general Juan José Torres, Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruíz y decenas de asilados en quienes se ha querido asesinar la posibilidad de procesos democráticos en Chile, Boliva y Uruguay.9
La segura participación en esos crímenes del Departamento de Asuntos Extranjeros de la Policía Federal, conducido por oficiales becados de la CIA a través de la AID, como los comisarios Juan Gattei y Antonio Gettor, sometidos ellos mismos a la autoridad de Mr. Gardener Hathaway, Station Chief de la CIA en Argentina, es semillero de futuras revelaciones como las que hoy sacuden a la comunidad internacional que no han de agotarse siquiera cuando se esclarezcan el papel de esa agencia y de altos jefes del Ejército, encabezados por el general Menéndez, en la creación de la Logia Libertadores de América, que reemplazó a las 3 A hasta que su papel global fue asumido por esa Junta en nombre de las 3 Armas.
Este cuadro de exterminio no excluye siquiera el arreglo personal de cuentas como el asesinato del capitán Horacio Gándara, quien desde hace una década investigaba los negociados de altos jefes de la Marina, o del periodista de "Prensa Libre" Horacio Novillo apuñalado y calcinado, después que ese diario denunció las conexiones del ministro Martínez de Hoz con monopolios internacionales.
A la luz de estos episodios cobra su significado final la definición de la guerra pronunciada por uno de sus jefes: "La lucha que libramos no reconoce límites morales ni naturales, se realiza más allá del bien y del mal".10

5. Estos hechos, que sacuden la conciencia del mundo civilizado, no son sin embargo los que mayores sufrimientos han traído al pueblo argentino ni las peores violaciones de los derechos humanos en que ustedes incurren. En la política económica de ese gobierno debe buscarse no sólo la explicación de sus crímenes sino una atrocidad mayor que castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada.
En un año han reducido ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que necesita un obrero para pagar la canasta familiar11, resucitando así formas de trabajo forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales.
Congelando salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas, aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y comisioncs internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del 9%12 prometiendo aumentarla con 300.000 nuevos despidos, han retrotraído las relaciones de producción a los comienzos de la era industrial, y cuando los trabajadores han querido protestar los han calificados de subversivos, secuestrando cuerpos enteros de delegados que en algunos casos aparecieron muertos, y en otros no aparecieron.13
Los resultados de esa política han sido fulminantes. En este primer año de gobierno el consumo de alimentos ha disminuido el 40%, el de ropa más del 50%, el de medicinas ha desaparecido prácticamente en las capas populares. Ya hay zonas del Gran Buenos Aires donde la mortalidad infantil supera el 30%, cifra que nos iguala con Rhodesia, Dahomey o las Guayanas; enfermedades como la diarrea estival, las parasitosis y hasta la rabia en que las cifras trepan hacia marcas mundiales o las superan. Como si esas fueran metas deseadas y buscadas, han reducido ustedes el presupuesto de la salud pública a menos de un tercio de los gastos militares, suprimiendo hasta los hospitales gratuitos mientras centenares de médicos, profesionales y técnicos se suman al éxodo provocado por el terror, los bajos sueldos o la "racionalización".
Basta andar unas horas por el Gran Buenos Aires para comprobar la rapidez con que semejante política la convirtió en una villa miseria de diez millones de habitantes. Ciudades a media luz, barrios enteros sin agua porque las industrias monopólicas saquean las napas subtérráneas, millares de cuadras convertidas en un solo bache porque ustedes sólo pavimentan los barrios militares y adornan la Plaza de Mayo , el río más grande del mundo contaminado en todas sus playas porque los socios del ministro Martínez de Hoz arrojan en él sus residuos industriales, y la única medida de gobierno que ustedes han tomado es prohibir a la gente que se bañe.
Tampoco en las metas abstractas de la economía, a las que suelen llamar "el país", han sido ustedes más afortutunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%, un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia.
Mientras todas las funciones creadoras y protectoras del Estado se atrofian hasta disolverse en la pura anemia, una sola crece y se vuelve autónoma. Mil ochocientos millones de dólares que equivalen a la mitad de las exportaciones argentinas presupuestados para Seguridad y Defensa en 1977, cuatro mil nuevas plazas de agentes en la Policía Federal, doce mil en la provincia de Buenos Aires con sueldos que duplican el de un obrero industrial y triplican el de un director de escuela, mientras en secreto se elevan los propios sueldos militares a partir de febrero en un 120%, prueban que no hay congelación ni desocupación en el reino de la tortura y de la muerte, único campo de la actividad argentina donde el producto crece y donde la cotización por guerrillero abatido sube más rápido que el dólar.
6. Dictada por el Fondo Monetario Internacional según una receta que se aplica indistintamente al Zaire o a Chile, a Uruguay o Indonesia, la política económica de esa Junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales encabezados por la ITT, la Esso, las automotrices, la U.S.Steel, la Siemens, al que están ligados personalmente el ministro Martínez de Hoz y todos los miembros de su gabinete.
Un aumento del 722% en los precios de la producción animal en 1976 define la magnitud de la restauración oligárquica emprendida por Martínez de Hoz en consonancia con el credo de la Sociedad Rural expuesto por su presidente Celedonio Pereda: "Llena de asombro que ciertos grupos pequeños pero activos sigan insistiendo en que los alimentos deben ser baratos".14
El espectáculo de una Bolsa de Comercio donde en una semana ha sido posible para algunos ganar sin trabajar el cien y el doscientos por ciento, donde hay empresas que de la noche a la mañana duplicaron su capital sin producir más que antes, la rueda loca de la especulación en dólares, letras, valores ajustables, la usura simple que ya calcula el interés por hora, son hechos bien curiosos bajo un gobierno que venía a acabar con el "festín de los corruptos".
Desnacionalizando bancos se ponen el ahorro y el crédito nacional en manos de la banca extranjera, indemnizando a la ITT y a la Siemens se premia a empresas que estafaron al Estado, devolviendo las bocas de expendio se aumentan las ganancias de la Shell y la Esso, rebajando los aranceles aduaneros se crean empleos en Hong Kong o Singapur y desocupación en la Argentina. Frente al conjunto de esos hechos cabe preguntarse quiénes son los apátridas de los comunicados oficiales, dónde están los mercenarios al servicio de intereses foráneos, cuál es la ideologia que amenaza al ser nacional.

Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de hechos malvados no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida, aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las 3 Armas que meditaran sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra que, aún si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del pueblo argentino no estarán dcsaparecidas sino agravadas por el recuerdo del estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.

Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles.

Rodolfo Walsh. - C.I. 2845022
Buenos Aires, 24 de marzo de 1977.



Rodolfo J. Walsh nació en 1927 en la localidad de Choele-Choel, provincia de Río Negro. Fue escritor, periodista, traductor y asesor de colecciones. Su obra recorre especialmente el género policial, periodístico y testimonial, con celebradas obras como Operación Masacre y Quién mató a Rosendo. Walsh es para muchos el paradigmático producto de una tensión resuelta: la establecida entre el intelectual y la política, la ficción y el compromiso revolucionario. El 25 de marzo de 1977 un pelotón especializado emboscó a Rodolfo Walsh en calles de Buenos Aires con el objetivo de aprehenderlo vivo. Walsh, militante revolucionario, se resistió, hirió y fue herido a su vez de muerte. Su cuerpo nunca apareció. El día anterior había escrito lo que sería su última palabra pública: la Carta Abierta a la Junta Militar.


Extraído de http://www.literatura.org/Walsh/Walsh.html

Poema de Franca Jarach


Pintura: Denis Duplock

Lugar

A la mañana paso
cerca de un sitio rodeado de muros
altos grises tristes sucios
de carteles, de vote lista azul
un día miro adentro
es una villa miseria.
Gente
más gente.
Vestida de tela barata
desnuda de felicidad.
Una chica me ofrece limones
"cien la docena, cómpreme"
Tiene trece años, más o menos
mi edad.
Un almacén ruinoso,
con ratas, con suciedad
con microbios funestos.
Es un sitio rodeado de muros
sucios de crímenes humanos
que son sólo los nuestros.

Franca Jarach
Nació en 1957, secuestrada el 25 de junio de 1976 y desaparecida desde entonces.

Extraído de "Desde el silencio" Editado por Página 12 1984

miércoles, 16 de mayo de 2007

Poemas de Roberto Santoro


Pintura: Claude Monet

Verbo irregular


yo amo
tú escribes
él sueña
nosotros vivimos
vosotros cantáis
ellos matan


Calcomanía

sonríe
dios te ama
disimula
el comisario vigila



Roberto Santoro
Buenos Aires, 1939. Desaparecido por la dictadura militar argentina el 1° de junio de 1977. Se hallaba en su lugar de trabajo: la Escuela Nacional de Educación Técnica N° 25 “Teniente Primero de Artillería Fray Luis Beltrán”, del barrio del Once (Capital Federal), donde el poeta prestaba servicio de preceptor, con el cargo de subjefe.

Extraído de: http://www.abanico.edu.ar
Enviado por Analía Pascaner

martes, 15 de mayo de 2007

Poema de Sergio Andrés Schiavini


Pintura: Paul Klee


CUANDO TODO ESTÁ QUIETO

¿Quién regresa, en esta mañana, en este tiempo
a ver aquello que tanto hemos amado?
(una flor nació en mi tierra muerta
y hay un niño que no sabe)

¡RECUÉRDENNOS!
Allí donde la tierra y el pasto intercambiaron sus vidas.
Allí donde hubo gritos y luz y una lejana siesta,
en un patio donde ladraban los perros.

¡RECUÉRDENNOS!
En las voces que se han ido y vuelven
lentamente
y alteran las mismas estrellas de otras noches.

¡RECUÉRDENNOS!
En la textura, los destellos del barro
cuando está todo quieto
y amanece.


Poesía
Del libro Noche descifrada

SERGIO ANDRÉS SCHIAVINI

Sergio Andrés Schiavini, poeta argentino nacido en Temperley, Provincia de Buenos Aires, en 1959. Fue asesinado el 29 de Mayo de 1991 en el Café “DALI” (a la vuelta de su casa) por las dos violencias: la marginal y la policial.

Enviado por Marita Ragozza

domingo, 13 de mayo de 2007

Poema de Alicia Raquel Burdisso


Pintura de Gustav Klimp


Poema


Ven,abandona esta madrugada
tus huecos y la soledad
donde encalló el egoísmo
y te fue devorando imperdonable.
Verás entonces, que era sólo mística
tu ceguera
que eran sombras en el alma
y que es posible alcanzar juntos el alba
para hacernos día.

Alicia Raquel Burdisso

Nació el 8 de mayo de 1952. Secuestrada en Tucumán el 27 de junio de 1977 y desaparecida desde entonces.


Extraído de "Desde el silencio" Editado por Página 12 (1984)

sábado, 12 de mayo de 2007

Poema de Juan Carlos Higa


Foto: Henri Matisse

Para quedarme en todos

Si yo me llamara juan ternura
qué distinto sería todo...
dejaría de ser yo para ser todos
un gol de media cancha entre
los pibes
una ternura abierta entre palomas
un corazón al sol
y un algo indefinible
cubriendo la mañana.
Sin embargo, soy juan carlos apenas
y no me alcanza para quedarme
en todos.


Juan Carlos Higa
Nacido el 26 de junio de 1947.
Desaparecido el 17 de mayo de 1977.
Uno de los catorce desaparecidos entre la colectividad japonesa en la Argentina.

Extraído de "Palabra Viva" de la SEA (Sociedad de Escritoras y Escritores de la Argentina) y del CONABIP. Año 2005

miércoles, 9 de mayo de 2007

Poema de José Eduardo Ramos


Pintura: Salvador Dalí


Pequeña historia de bolsillo

Luego de tomar
el último sorbo de café,
y con un gesto que yo amaba,
dio vuelta la esquina
entre la gente
y se metió en mí
hasta perderse.


José Eduardo Ramos
POETA TUCUMANO DESAPARECIDO DURANTE LA DICTADURA MILITAR ARGENTINA
Poema escrito a los 16 años de su libro “Poemas cotidianos”


Extraído de "Palabra viva"
Editado por la Sociedad de Escritoras y Escritores de la Argentina (SEA) y CONABIP (Año 2005)